Los pasados 13 al 16 de junio tuvo lugar una nueva edición del campo de trabajo de Sobrepeña, una localidad leonesa que se ha convertido para nosotros en un espacio único donde explicar la solidaridad no solo desde la teoría, sino desde su puesta en práctica.
Cada año, ¡y ya van 18!, chicos y chicas en tratamiento terapéutico participan en esta actividad en la que llevan a cabo diversas tareas de mantenimiento para ayudar a los vecinos de Sobrepeña a mejorar y mantener vivo el lugar.
Con el paso de los años, gracias al esfuerzo conjunto de usuarios, terapeutas y vecinos, el pueblo ha visto cómo mejoraba el aspecto de su cementerio, cómo caminos que antes eran intransitables vuelven a dar la bienvenida al caminante o cómo nacía un pequeño parque temático con enseres de los vecinos que preservaría por siempre la historia de sus habitantes, entre otros cambios. Este año tocaba fijar la vista en el horizonte y construir un mirador desde el que disfrutar del bello paisaje montañoso que rodea el lugar.
Ahora bien, Sobrepeña no se reduce a trabajo físico, a tareas de mantenimiento, al “pico y pala”, ni mucho menos. Mª Luisa Poladura, responsable de la Comunidad Terapéutica, recuerda que en este campo de trabajo, donde la solidaridad impregna el día a día, los objetivos son muchos: “escapar del ruido urbano y ver otras realidades; llenar tu vida con otras experiencias, comprobar que, por muy dura que parezca una tarea, con esfuerzo y trabajo en equipo todo es posible; conocer a los vecinos a los que vas ayudar desinteresadamente y quienes te darán las gracias con todo lo que tengan…”.
En esta ocasión, participaron en el campo de trabajo 16 personas de nuestros recursos de tratamiento, así como Fernando Zárate y Juan Carlos Martín, terapeutas de la entidad.
Gracias a los vecinos de Sobrepeña, especialmente a nuestro amigo Antonio García, anterior presidente de Fundación Aldaba y gran impulsor del proyecto, por regalarnos un año más la oportunidad de vivir esta experiencia en la que conocernos, mejorarnos, crecer y ayudar a crecer a nuestro alrededor.